¿Qué hago si quien necesita ayuda no quiere ir a un psicólogo?

En muchas ocasiones se nos presenta la situación que aún detectando un problema cuya solución sabemos que pasa por recibir ayuda de un psicólogo la persona a la que compete directamente ese problema no quiere o no puede recibir esta ayuda. ¿Nos damos por vencidos o hay alguna otra opción? Hay más opciones y en este artículo te lo vamos a contar.

Una situación muy común es con las situaciones con niños sobre todo cuando estos son muy pequeños o no están dispuestos a acudir. Esta situación es mucho más común de lo que parece. ¿Qué hacemos cuando sucede esto? En muchas ocasiones para ayudar a nuestros hijos es suficiente con acudir nosotros a la consulta del psicólogo, presentarle el caso y que este nos de las herramientas para ayudar a nuestros hijos. Estas herramientas a veces son para que nuestro comportamiento sea el más adecuado para lo que está sucediendo y ayudemos al máximo a nuestros hijos y, en otras ocasiones, son recursos que nosotros le podemos enseñar a nuestros hijos para ayudarle a afrontar mejor eso que les atormentan. De hecho, en alguna ocasión aunque el niño esta dispuesto a venir a consulta tras evaluar el caso creemos que es más conveniente trabajar únicamente con los padres en vez de directamente con el menor. Por lo que es muy común esta situaciones, donde padres y familiares vienen a consulta para ayudar a un menor con sus problemas.

¿Cuándo también podemos acudir nosotros en vez del paciente directamente? En problemas de adicciones también se suele trabajar mucho con familiares y amigos directamente en vez de con la persona con problemas de adicción. Además, resulta de mucha ayuda para el entorno tener las herramientas necesarias para abordar situaciones que son complejas y que nos afectan.

Una situación que es muy importante que acudamos a consulta nosotros en vez de la persona que tiene el problema es en situaciones de violencia de género. Para que la víctima pueda superar esa situación en muchas ocasiones es muy importante que el entorno actúe como ella necesita y para ello a veces debemos tener ciertos conocimientos, herramientas y recursos para proporcionarle la mejor ayuda a nuestra amiga, hermana, hija, prima...

¿Sólo en estas situaciones? Desde mi experiencia personal y profesional debo responder que no, no únicamente en esas situaciones concretas. En muchas ocasiones la realidad nos abruma, nos vemos indefensos, sin recursos para afrontar nuestras situaciones o apoyar a nuestro entorno para que afronte esas situaciones que les desbordan. Aprender siempre está bien, no sentirnos sobrepasados, tener las herramientas y recursos para sentirse tranquilos por la manera en la que afrontamos todas estas situaciones de nuestro día a día favorecerá a conseguir ese bienestar que siempre perseguimos.

Por todo ello, cuando una situación que te afecta directamente a ti o a alguien de tu alrededor al que quieras ayudar no dudes en pedirnos ayuda.

Nos vemos en consulta, aprender siempre es beneficioso.